Sunday, July 08, 2007

ON THE ROAD AGAIN


El Festival de Jazz de Montreal esta en train de enviar las ultimas notas de este ano al aire, saben? es uno de los eventos que me permite pasar a travez del invierno, ese invierno que se estira por cinco largos meses, y que nos trae toneladas de nieve y millones de grados bajo zero. No es del invierno que queria hablar, y tampoco queria hablar, quiero dejar hablar las imagenes que pude captar a travez de este evento, yo creo que ellas son mas decidoras que toda la emocion que yo pueda describir en este papel, asi que aqui va una primera parte :


























Sunday, July 01, 2007



JAZZ-TIEMPO


Si, ya es tiempo de jazz en Montreal, el verano llego, las terrazas desbordan de gente que tiene como religion : LA FIESTA, las cervezas revolotean entre las mesas, las conversaciones dejan en el olvido el cotidiano (politica, precio de la gasolina, pandillas de la calle, etc...).

Jueves, 28 de junio, 23:00 horas, me encuentro en la parte alta de Place des Arts, en el corazon del Festival Internacional de Jazz de Montreal, hay algunos que me detestan por ello, lo siento. Me preparo a asistir al espectaculo que dara Jose Martinez, un hombre de flamenco, secundado por Marcelo, un loquito argentino, que me ha regalado de tiempo en tiempo con sus canciones y que con ellas viene ese paquete de amistad generosa del sur.

Los primeros acordes atacan el cielo de Montreal, la noche se despierta, el musculo cardiaco se sobresalta, y la fiesta comienza, palmas, danza, el Sol de medianoche de su musica, nos hace olvidar el dolor de la conquista.

Poco a poco nos adentramos por los caminos de España, esos de las bulerias, los mesones de Martos, la Guernica de Picasso, Don quijote y su eterno Sancho, Serrat y Serrano y por un instante, retorno a Patricia Canales que nos danzaba su endiablado flamenco en cada fiesta, y me doy cuenta que mi memoria nunca ha estado encadenada.

Los acordes se escapan por los poros de la noble madera, viajan entre Marcelo y José, revolotean entre la percusion de Ziya y respiran en el contrabajo de Sebastien. Una simbiosis casi obscena se instala entre esta Torre de Babel de cuerdas y tendones, una cascada cae sobre los espectadores y la noche fria termina por inflamarse.

Un nuevo festival comienza con el calor venido de otras partes, una de ella se llama Sur, el cual tambien existe.

Italo Lemus
Fotografo de Prensa y Cronista